09 Dic En Roma con el Papa
El primer Domingo de Adviento, como cada año, el papa Francisco, rezó las vísperas junto a todos los jóvenes universitarios, y religiosas de la Pureza, junto a algunas de las chicas de la residencia, acudieron a esta gran cita. Y como ya hizo en Brasil, el Papa volvió a repetir que no se mirara la vida desde el balcón, sino implicándose de lleno en ella, y llamó a no dejarse robar el entusiasmo juvenil: “¡No hay que resignarse a la monotonía del vivir cotidiano, sino cultivar proyectos de amplio respiro, ir más allá de lo ordinario: ¡no se dejen robar el entusiasmo juvenil!”. Fue una celebración preciosa y sobretodo llena de jóvenes. Muchísimos jóvenes no pudieron entrar a la basílica y siguieron la celebración desde fuera.
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