Hay que jugar Day of the Tentacle porque es un clásico, pero no sólo. Recuperar un juego tan importante como éste, publicado originalmente en 1993 y que se lanza ahora en una estupenda remasterización, puede hacernos adoptar una postura de reverencia (casi como el que hace los deberes o visita un museo) que nos impediría disfrutar de lo que realmente es: una comedia divertidísima, un brillante ejercicio de ingenio y una lección nada pretenciosa de narrativa interactiva.

Day of the Tentacle, creado por Tim Schafer y Dave Grossman, es la secuela de Maniac Mansion, el juego que dio origen a las aventuras gráficas, género narrativo armado sobre el diálogo y la resolución de puzles. Es un pedigrí importante, y Schafer y Grossman podrían haber caído en el temor y el inmovilismo, porque ¿quién se atreve a añadir o quitar a un clásico? Sin embargo, se soltaron el pelo y reinventaron el juego original, una parodia-homenaje a las películas de terror y serie B de los 50, a través de un filtro cartoon desmadrado a lo Chuck Jones o Tex Avery (los de los Looney Tunes). Con esa apuesta, montaron un relato sobre viajes en el tiempo que nos hace alternar entre tres personajes, cada uno atascado en una época, y que funciona según sus propias lógicas absurdas

Título: ‘Day of the Tentacle Remastered’. Desarrollador: Double Fine Productions. Género: Aventura. Año: 2016. Plataformas: PC, Play Station 4, Play Station Vita. Website: dott.doublefine.com